A nuestro alrededor hay una gran cantidad de sonidos. Todos ellos pueden variar e ir desde los más débiles a los más intensos. El tono y la intensidad son, precisamente, los elementos a tener en cuenta en lo que se conoce como el rango auditivo humano. Pero ¿sabes cuál es la frecuencia del oído humano? El tono de los sonidos se mide en Hertz (Hz), mientras que la intensidad se mide en decibelios (dB). El campo auditivo humano es capaz de percibir una banda específica de frecuencias y un rango específico de intensidades. Dependiendo de unos valores u otros, serán más o menos perceptibles para el oído.
¿Qué es la frecuencia del sonido?
La frecuencia del sonido se define como el número de variaciones de presión u oscilaciones completas por segundo. Se dice, por tanto, que la frecuencia de un sonido es la que le da su tono característico. Hace referencia al número de veces que el aire vibra en un segundo cuando transmite un sonido.
¿Cuál es el rango de frecuencias que percibe el oído humano?
Una persona con un rango auditivo normal puede percibir una frecuencia mínima de 20 Hz aproximadamente. Por otro lado, la frecuencia más alta posible que podemos percibir sin que resulte molesta se sitúa en torno a los 20.000 Hz. Así, el rango de frecuencia que puede soportar cómodamente nuestro oído oscila entre los 20 y los 20.000 Hz. Estas cifras son las que marcan los límites del espectro audible. Sin embargo, la audición más sensible para cualquier persona es la que se halla en el rango de frecuencia que va de los 2.000 a los 5.000 Hz.
Si hablamos en términos de decibelios, una persona que tenga un rango auditivo sano puede percibir sonidos de 0 a más de 85 decibelios. No obstante, estos últimos pueden resultar ya perjudiciales para la salud auditiva en caso de ser prolongados en el tiempo y constantes.
Especies animales que poseen un mayor rango de frecuencia
El rango de frecuencia del oído humano se considera de un nivel medio. No obstante, resulta bastante bajo si lo comparamos con otras especies de animales.
Los murciélagos son capaces de oír sonidos de hasta 160.000 Hz, es decir, 8 veces más que cualquier ser humano. A pesar de todo, no es el animal que tiene un mayor espectro audible: la ballena dentada, puede oír una frecuencia de sonido que oscila entre los 40 y los 325.000 Hz, 16 veces más que una persona humana; y el delfín, hasta 150.000 Hz, es el tercer animal que tiene un mayor poder auditivo.
El rango de frecuencia y la pérdida de audición
La pérdida de audición que se produce con el paso de los años o por otras cuestiones de salud provoca que el rango de frecuencia del oído humano disminuya. Una pérdida que también puede estar motivada por razones hereditarias, por exposiciones a ruidos, por enfermedades o infecciones, problemas en el embarazo, traumatismos o daños físicos en el oído, etc. Los audífonos son una excelente solución para paliar el problema de la pérdida de audición. Se encargan de ampliar y modificar las señales sonoras para así permitir una mejor audición. De hecho, el uso de los audífonos estimula el cerebro y le hace recordar sonidos que no se podrían oír sin llevar un audífono.
Actualmente se vincula de manera estrecha la degeneración cognitiva con la pérdida de audición, por tanto, ya no solamente se trata de percibir los sonidos que nos rodean, sino de privar al cerebro de estímulos, y con ello, su deterioro progresivo. Es por esto tan importante prevenir o poner solución a una perdida auditiva cuanto antes.
En el mercado actual hay diferentes tipos de audífonos para adaptarse a las necesidades de cada persona. La mayoría poseen una tecnología auditiva avanzada para disfrutar de la mayor calidad de escucha. Podrás disfrutar de un mayor bienestar auditivo y solucionar tu problema de pérdida de audición, además de contar con formatos modernos y casi invisibles que los hacen mucho más atractivos para su usuario.
