A veces parece que es como “la pescadilla que se muerde la cola”. Cuando tienes un tic tiendes a pensar es el más evidente de todos, que todo el mundo se da cuenta de él. Por supuesto que no lo es, pero es difícil verlo de forma objetiva, se convierte en un tema omnipresente desarrollando sentimientos innecesarios de vergüenza que empeoran el tic ocular. Nadie quiere empeorarlo, pero ¿hay alguna manera de mejorarlo o tratarlo?
¿Qué son los tics oculares?
Los tics oculares son movimientos rápidos, repetitivos e involuntarios de algunos de los músculos situados alrededor del ojo. Estos movimientos motores excesivos pueden variar de leves y apenas perceptibles, a casos más severos en los que pueden comenzar a interferir con el funcionamiento visual normal, afectando de forma considerable a otras áreas de la vida como la confianza en uno mismo.
¿Qué causa los tics oculares?
Los tics oculares son una acción muscular involuntaria e inoportuna que puede llegar a ser muy frustrante. Algunas personas pueden controlar y suprimir sus tics durante un corto periodo de tiempo; sin embargo, esto puede ser difícil y por lo general no dura mucho.
La gravedad y duración de los tics a menudo depende de la causa y, en algunos casos, los tics oculares aparecen y desaparecen sin razón aparente.
La causa más común de los tics oculares se puede atribuir a un trastorno como el síndrome de Tourette; sin embargo, otras causas más comunes son las siguientes:
- Estrés o ansiedad
- Fatiga extrema
- Efectos secundarios de algunos medicamentos como Ritalin, Dexedrine y Adderall
- Abstinencia de medicamentos como la benzodiazepina
- Infecciones del cerebro como la encefalitis
- Afecciones neurológicas
- Deficiencia de magnesio
Como se pueden tratar los tics oculares
Existen opciones para mejorar la situación y tratarlos:
- Túmbate un rato para relajarte de forma que mantengas tus niveles de ansiedad bajos.
- Prueba técnicas de respiración profunda y relajación muscular para ayudarte a relajar en situaciones estresantes. En el caso de los tics en niños también se beneficiarán de aprender maneras constructivas de lidiar con su ansiedad.
- Incorporar el ejercicio físico como una parte esencial de tu rutina diaria. 30 min de ejercicio moderado puede ayudar mucho a reducir el estrés y la ansiedad y por lo tanto puede ayudar a reducir los tics oculares.
- Asegúrate de comer suficiente magnesio. Los alimentos ricos en magnesio incluyen vegetales verdes como la espinaca y el brócoli, así como frijoles, guisantes, nueces y semillas.
- Asegúrate de que duermes suficientes horas y que es sueño de buena calidad, intenta seguir una buena rutina de sueño. Si sufres de insomnio, toma las medidas necesarias para resolverlo o, al menos controlarlo.
- La psicoterapia a menudo es útil, ya que te ayuda a controlar muchas de las causas subyacentes de los tics, como la ansiedad o el estrés, y también pueden ayudarte a lidiar con el impacto emocional que los tics suelen tener.
Por supuesto, si el problema continúa y no se resuelve al controlar tu ansiedad o tu dieta es el momento de acudir a un especialista y revisar a fondo para encontrar soluciones.