GRADUACIONES ENTRE DUNAS
Hoy hemos terminado con éxito nuestro segundo día de revisiones. Esta vez, la localización ha sido Bagaa, una aldea con una pequeña y muy acogedora población compuesta por 50 familias (unos 300 habitantes). Antes de comenzar la jornada, no nos hemos podido resistir a hacernos unas cuantas fotos para aprovechar la idílica ubicación del hotel donde hemos dormido: ¡A los pies de unas espectaculares dunas! Impresiona también saber, además, que todo esto era un gran océano y que gran parte de los fósiles descubiertos hasta ahora provienen de esta zona. Para los más curiosos y detallistas que quieran venir o verlo en internet, os contaré que estábamos en el hotel Tombouctou y a los pies de la Gran Duna o Erg Chebi.
Terminado nuestro inolvidable rato de ocio, nos hemos desplazado en menos de una hora hasta Bagaa (pronunciado Bega) para hacer lo que hemos venido a hacer: revisar la vista a quienes no tienen recursos ni posibilidades de hacerlo. Comenzamos con los adultos… sin poder resistirnos a jugar con los peques que los acompañaban. Tan buen ritmo de revisiones mantuvimos que a medio día ya llevábamos más que el día de ayer completo, es decir, más de 60.
Cuando terminamos la primera tanda de graduaciones, salimos a tomar el aire un rato fuera de la construcción de adobe donde estábamos. Pudimos ver a una gran cantidad de niños que venían directos hacia nosotros recién salidos de la escuela. Tras jugar un rato con ellos, nos metimos dentro a revisarles. En total, hemos graduado a 92 personas, que son todas las que han venido a vernos.
Y terminada la tarea, nos hemos reencontrado con la caravana de El Desierto de los Niños en un campamento de jaimas. El campamento en sí es espectacular y, además, está junto a otras preciosas dunas. Un paisaje idílico para cenar y descansar al máximo… porque mañana debemos tener la máxima energía para nuestro tercer día de graduaciones, que será en Merzane ¡Seguimos!
Puedes ver todas las fotos de la aventura en este enlace.