Es sorprendente que, aunque el ojo ocupa menos del 2% de la superficie total de nuestro cuerpo, sea el único sistema de órganos que permite la penetración de la luz visible en lo profundo del cuerpo humano.
Durante la evolución humana se han desarrollado una serie de mecanismos para proteger este órgano muy sensible contra los efectos dañinos de los rayos solares. El ojo está encastrado dentro de la anatomía de la cabeza y bien protegido por las cejas y las pestañas. Pese a esta protección, una elevada exposición a la radiación ultravioleta (UV) puede causar daños en nuestros ojos.
Fotoqueratitis
Siguiendo con nuestra serie de posts sobre patologías visuales producidas por el sol, en este capítulo os vamos a hablar de la Fotoqueratitis.
La fotoqueratitis es una patología que se produce cuando la exposición excesiva a la luz ultravioleta daña nuestra córnea. La córnea es la «ventana» transparente en forma de cúpula que cubre la parte frontal del ojo. Es la parte más externa del ojo.
La fotoqueratitis puede ser dolorosa. El daño en la córnea es comparable con el daño que la luz ultravioleta puede causar a la piel, provocando quemaduras solares.
La forma más grave de fotoqueratitis se llama ceguera de las nieves, algo que los montañistas y los entusiastas de las actividades al aire libre en invierno pueden encontrarse en alto riesgo si no se protegen adecuadamente.
El riesgo es causado por la luz solar que se refleja en la nieve o el agua. Otras causas de fotoqueratitis son las lámparas UV de alta intensidad, como las que se utilizan para broncearse o para algunos tratamientos médicos, los arcos de soldadura e incluso los rayos y las chispas eléctricas.
¿Cuáles son los síntomas de la fotoqueratitis?
Lo más común es una sensación de cuerpo extraño o “arenilla” en el ojo. Sin embargo, existen otros síntomas:
- Enrojecimiento del ojo
- Fotofobia: es posible que la luz intensa le produzca molestias o dolor
- Blefarospasmo: Una contracción involuntaria y repetida de los músculos que rodean el ojo
- Lagrimeo
- Visión borrosa
¿Qué tratamiento se necesita para la fotoqueratitis?
A menudo, los síntomas de la fotoqueratitis desaparecen por sí solos, si no de inmediato, generalmente en un lapso de 24 a 72 horas. La fotofobia leve puede durar hasta una semana más o menos.
Sin embargo, si el dolor o malestar dura, o es severo, una visita al oftalmólogo puede ayudar a descartar algo más grave.
Prevención de la fotoqueratitis
La protección de los ojos en todo momento es importante, especialmente durante la infancia. Una exposición excesiva a la luz solar puede causar otros tipos de daño ocular, como acelerar la formación de cataratas, además de la fotoqueratitis.
Para reducir el riesgo de daño ocular causado por el sol, es fundamental usar siempre gafas de sol con protección frente al 100% de la radiación UV, además de gafas de sol adecuadas para la práctica de actividades que implican una gran exposición como el esquí.
Y recuerda que los niños están también expuestos a los daños del sol, así que, al igual que proteges su piel de los daños del sol, no olvides hacerlo con sus ojos.