A la hora de elegir unas gafas de sol, además de los consejos habituales como adquirirlas en un establecimiento sanitario de óptica y verificar que cuenten con el etiquetado que informa que están homologadas (podéis leer sobre estos consejos aquí) hay que tener también en cuenta el color de la lente.
Las gafas de sol son un elemento muy relacionado con la moda. Las personas cambian de gafas de sol adecuándose a las tendencias del momento: más grandes, cuadradas, pequeñas, redondas, etc. y lo mismo pasa con los cristales de las mismas: grises, espejados, azules, etc.
La función más importante de unas gafas de sol es el bloqueo de la luz perjudicial que proviene de los rayos ultravioletas pero no deben alterar la percepción y la nitidez. En algunas actividades es de suma importancia que las gafas de sol no afecten a la percepción de los colores. Por ejemplo, en el caso de la conducción, una distorsión cromática o una pérdida de contraste aumentan el riesgo de accidente de tráfico. Por ello, para la conducción se recomienda la lente gris, especialmente recomendable porque ofrece una percepción correcta de los colores.
Cada color de lente tiene unas propiedades y protege de forma distinta. A continuación vamos a ver los más habituales:
- Marrones: ofrece una visión cómoda y refleja los colores cálidos pero sin realizar grandes alteraciones de los colores. También, mejora los contrastes y aumenta la profundidad de campo por lo que resulta ideal para deportes al aire libre.
- Grises: son las lentes más habituales y las más apropiadas para un uso general, ofrecen una percepción correcta de los colores. Se indican especialmente para conducir y en los casos donde la profundidad de campo es menos importante que tener una correcta percepción de los colores.
- Amarillas: son efectivas con poca luminosidad. Mejoran la visión de contraste en días nubosos y/o con niebla, donde pueden suponer una ayuda a la seguridad. Pero no son recomendables para conducir en días soleados, ya que pueden provocar errores en la percepción de las luces de los semáforos.
- Polarizadas: eliminan los deslumbramientos molestos producidos por superficies muy reflectantes como la nieve o el agua. Garantizan mayor comodidad y una visión rica en contrastes. Eliminan brillos excesivos reduciendo así la fatiga ocular. Además protegen 100% contra los rayos UV. Son unas lentes ideales para las personas con sensibilidad a la luz.
Para ilustrar mejor toda esta información, podéis ver un simulador de conducción con distintos tipos de lentes solares aquí.